Capitulo XII- Cuarentena

-Pero quien te crees que eres!- me decía una Zayra notablemente enojada

-Zay, acabo de salir del hospital, ya era muy tarde- le decía condescendiente

-No me importa! Si quiera unas señales de humo, o lo que sea, espérate a que llegue Diana, esta igual de enojada

-Hay reunión ¿acaso?

-Pues que esperabas, le dije que me llamarías, por que sabia que ibas a hacerlo, Zeltzin llamo de nuevo para ver si ya teníamos noticias tuyas, pero como ni te dignaste a decir nada, pues somos nosotras las que debemos averiguar todo, pero la información ha desaparecido

-Discúlpame comadre, ya todo esta bien

-Ya llego Diana!

-Encanto de mi alma, ¿Cómo estas?

-Muy bien cielo, ya estoy en casa

-Nos tenias muy asustadas, pero veo que te encuentras bien, hasta estas un poco ruborizada

-Es la luz xD

-Seguro el tío mmy te visita seguido ¿no?- dijo Zayra de pronto riéndose a carcajadas

-Si, me visita seguido- les dije en un tono coqueto

-Sucia!

-Encanto, entonces tu y el ya…?

-No castañuelita, hemos estado ocupadas con la hija de Gustav, que es un encanto por cierto, les encantara cuando la conozcan

-A mi el que ya me encanta es el papazón- decía Zayra dando vueltas por todos lados, apareciendo y desapareciendo de mi visión

-Estoy segura de que a el le encantara conocerte, deben venir pronto

-Comadre, te tardaste un año en venir a conocernos, ¿Por que deberíamos ir nosotras de inmediato?

-Por que me aman y se que me extrañan

-Yo extraño esas noches- decía Diana suspirando

-Yo también las extraño comadre, desde que nació Melissa, ya ni me pelas- dijo zay cruzando los brazos

-Sabes que no es por ti, si no por el paranoico de tu marido, si el supiera lo que hacíamos en cada reunión, nos cuelga a las tres

-Siempre usas el mismo pretexto Matilda, eso no se vale, pero ya veras, ya no cocinare contigo nunca mas- me decía en un tono que parecía estar recordando aquellos locos tiempos

-Llámanos mas seguido, mi amor- dijo de pronto Diana divertida- te extrañamos, ya queremos que estés aquí nuevamente

-Pronto será, acabaremos con el seguimiento y me tendrán de regreso en casa

Les mostré una foto de Allison, puras palabras salieron de sus bellas bocas, Melissa me saludo por la cam, ha crecido mucho, es un poco mas pequeña que Alli, así que podre verla crecer a mi regreso a México, les comente sobre mis cuidados, y recordamos aquellas líneas que escribió Diana en el fic, aquel causante de nuestra unión y de nuestro embelesado enamoramiento.

Colgamos prometiendo vernos pronto nuevamente, y así comenzó mi cuarentena.

Me preocupaba que Allison tuviera algún problema auditivo, ya que no tenia pronunciación de las palabras completas, Catalina se encargo de llevarla con un colega que teníamos en Alemania, era el dieciseisavo día de mi cuarentena, la próxima semana es el cumpleaños de Cat, así que debo hacer algo, aunque no será de alto impacto, como yo quería.

Estaba a punto de ir al cuarto del balcón, la ansiedad ya me mataba, estaba sustituyendo el tabaco con zanahorias, pero no es lo mismo >.<

Tocaron la puerta…

-Ya voy- decía caminando “rápido”

Abrí la puerta y era Tom, se asusto al verme de pie y prácticamente me regaño

-Tom! No estoy inmóvil, ya te dije- trataba de zafarme de sus brazos, me traía cargando como a un bebe camino a mi habitación

-No me importa, el doctor dijo que no te movieras

-Pero si solo iba a tomar un poco de aire y sol, ya me aburrí de estar aquí, Catalina no deja que me mueva, hasta a la ducha va conmigo

-Pues eso esta bien, que tal si te caes- me decía poniéndome suavemente en la cama, y después se dirigió a abrir las ventanas y las cortinas

-¿Ya es suficiente aire? ¿Tienes hambre?

-No, quiero ir al balcón

-Mientras este aquí no te vas a mover- decía poniéndose enfrente de la puerta de mi habitación con los brazos cruzados

-Vamos Tom, déjame ir al balcón, anda- le decía en un tono coqueto que ni yo me creía

-No! Y deja de provocarme- se dio la vuelta mientras reía

-Anda Tom- le dije abrazándolo por la espalda tomándolo por sorpresa, dio un leve brinco y se dio la vuelta hacia mi, para cargarme de vuelta a la cama

-Te quedaras en cama todo el día- dijo en tono a conclusión

Hice mi cara de puchero y cruce los brazos, Tom se sentó frente a mi y yo voltee la cara a otro lado

-No te enojes, solo quiero que te recuperes pronto- me dijo tomando mi barbilla y viéndome fijamente

-Por cierto- dijo el soltándome- aquí esta tu púa, se me había olvidado traértela

-Es verdad, se me había olvidado con tanto ajetreo- me senté sobre mis rodillas quedando el frente a mi, se puso en la misma posición, y levante mi cabello para que la pusiera.

Paso sus manos con suavidad por mi cuello, se inclino hacia mi para abrochar la cadena, sentía su respiración en mi hombro, era cálida… muy cálida…

-Ya esta- me dijo apoyando sus manos en mis hombros quedando su cara muy cerca de la mía

-Gracias, ya la extrañaba- le dije viéndolo fijamente y ruborizándome un poco es la luz pensé de nuevo

-Debo obedecer al doctor- dijo suspirando y sentándose en la orilla de la cama, me acerque a el y apoye mi cuello en su hombro

-¿Eso que significa Tom?- le dije en forma curiosa

-Que no debo fumar dentro de tu habitación- dijo jugueteando con las manos y decepcionándome un poco XD

-Uhm, que aburrido- le dije acostándome en la cama recargando mi cabeza en la almohada- deberíamos ver una película

-¿Qué aburrido, que?- dijo poniéndose sobre mi, apoyado en sus manos y rodillas, quedando su cara frente a la mía

-Debes obedecer lo que dijo el doctor- le dije riendo, sin dejar de verlo

-Te apuesto a que si estuvieras sana, no dirías que soy aburrido- dijo alzando una ceja y acercando su cara a la mía

-¿Y por que estas tan seguro?- le dije acercándome mas a el, casi hablaba en su boca, sin previo aviso cerro sus ojos y junto sus labios a los míos, paso una de sus manos por mi cabello, y sutilmente se recostó sobre mi…

-Ay!- dije de pronto, una punzada me tomo por sorpresa, Tom salto de la cama, cayendo al suelo

-Mati, ¿te duele? Que imbécil soy!- me dijo mientras se levantaba aceleradamente haciendo la mueca de tocarme, sin acercarse

-Estoy bien, lo siento- dije poniendo mi mano en el abdomen- creo que tendremos que hacerle caso al doctor u.u

-Soy tan estúpido- dijo de pronto dando vueltas por alrededor de la cama

-Ya Tom, basta, si a culpas vamos, también tengo parte de ella- dije enderezándome y sentándome en la cama

-No te muevas mas

-Iré al balcón- dije levantándome- si nos quedamos aquí, terminare siendo una masoquista

-Yo te llevo- me dijo cargándome nuevamente- al balcón!

Nos sentamos por un rato, sin comentar lo sucedido…

-¿Por qué es tan importante esa púa?- dijo curioso acercando el banco al mío

-Por que me la gane, después de un ojo morado y un par de arañazos, en un concierto de un grupillo, no se si lo conozcas, se llama Tokio Hotel- le dije entre risas

-Ah si, lo he escuchado- decía siguiéndome el juego- dicen que el guitarrista es la persona mas sexy del mundo y que es todo un semental- dijo sacudiéndose ambos hombros XD

-Yo escuche que el vocalista era mas sexy

-Escuchaste mal- me dijo negando con la cabeza

-Que se yo, es importante por que cumplí 21 años el día del concierto

-Yo creí que era importante por que es la púa del sexy del guitarrista

-Una de no se cuantas que avientas cada concierto, no sea exagerado- le dije soltando una risa escandalosa e inclinándome hacia delante

-¿Que se siente estar frente a tu estrella favorita?- dijo inclinándose hacia atrás y cruzando una pierna

-No lo se, te diré cuando eso pase

-Que graciosa eres

Un momento después escuche abrir la puerta y un poco de ruido, supuse que era Catalina con Allison, nos levantamos y Tom me cargo por enésima vez

-Haruka, te tengo una sorpresa!!- decía Catalina emocionada mientras ambos nos dirigíamos a la sala…

No estaba Allison, Catalina dijo que la regreso a su casa, estaba cansada y un poco aturdida, los resultados los entregaran en tres días, Tom me bajo lentamente al ver que Cat estaba acompañada por un chico…

Uno que me resultaba terriblemente familiar…

-Haruka- dijo el acercándose rápidamente y abrazándome

Tom hizo una mueca de muy pocos amigos, se hizo hacia atrás, y cuando Marco, porque así se llama el tipo este, me soltó, Tom puso su mano frente a mi, como un escudo

-Si vuelves acercarte así a ella, la lastimaras, ¿Qué no sabes que esta herida?- le dijo Tom casi gritando

-¿Y este quien es?- dijo Marco entre risas, volteando a ver a Cat

-Que te importa- le dije yo en español y retirándome a mi habitación dejando a esos tres en la sala.