Todos alguna vez estaremos Oliendo Pelusas.

¡Bienvenido seas alma perdida!

Anteriormente, hablando del año 2009, este espacio estaba dedicado a la publicación de sandeces, aka fan fiction de la banda alemana de poprockpunknoseque Tokio Hotel.

Sin embargo, después del tiempo que ha sucedido, la temática ha cambiado y, aunque en los archivos están aún esas sandeces, probablemente los escritos que aparecerán próximamente sean más de otros temas, que de la misma banda.

Éste sigue siendo su espacio, éstas siguen siendo sus letras, y esta siempre será la agonía de las palabras.


sábado, 12 de septiembre de 2009

Capitulo XIII- Sembrando la duda

Los resultados de Alli resultaron positivos, le han dado un par de vitaminas sabor naranja, y recomendaron que no saliera de casa, por lo tanto Cat iba todos los días dejándome parte del día….lamentablemente acompañada por Marco…

Cat le había facilitado una llave de nuestro departamento, se quedaba en un cuarto que ni me había fijado que estaba, y por mucho que no estuviera de acuerdo, no podía hacer nada, por lo pronto hoy es el cumpleaños de Cat…

-Catalina- le dije llamándola a mi habitación

-¿Que paso?- dijo cerrando la puerta

-¿Cómo que QUÉ?- le dije extendiendo mis brazos- Feliz Cumpleaños!!

-Ay, Mati, gracias!- decía mientras se hincaba frente a mi en la cama para abrazarme

-No puedo creer que pienses que me había olvidado, te he comprado un regalo- le dije extendiendo la caja con el gran moño carmesí

-oh Dios!- grito emocionada desgarrando la envoltura- no pensé que lo olvidaras, si no que no me hablarías, se que sigues molesta por que Marco esta aquí….woooo- dijo quedándose boquiabierta y después de unos segundos, tapándose la boca, viéndome y viendo el regalo- eres una perra! ¿Cómo sabes que..?

-Vamos Cat, por lo menos formula una pregunta- le dije entre risas y abrazándola nuevamente- sabia que te intereso algo en la famosísima tienda, así que fui, y ahí están

-¿¡Y luego me preguntas que por que te amo!?- dijo de manera ruda y tirándome con “delicadeza” sobre la cama, comenzó a levantar mi pijama y besarme el abdomen, yo solo reía como desquiciada queriendo quitarla de encima

-Ya basta Catalina- le decía deteniéndole las manos con mi voz entrecortada, respiración agitada y lagrimas en los ojos de tanto reír

-Que bueno que estas feliz- decía entre beso y beso- así no te molestara que salga a festejar mi cumpleaños hoy en la noche

Me detuve en seco, la mire y ella me sonreía simplona, me explico el lugar al que iría con los TH, y que esperaba que no me molestara con Marco.

Se fue con Alli, regreso unas horas mas tarde, se dio una ducha, se puso un vestido que me volvía loca, estúpida herida, pensé molesta de no poder aprovechar la situación, los gemelos pasaron por ella una hora después y se fueron.

-Que bien que tendremos tiempo de hablar- decía Marco entrando a mi habitación

-Veo que se te han olvidado los modales – le dije levantándome y saliendo rumbo a la cocina, estar a solas con el, es incluso mas peligroso que estar con Tom

-Es hora de que hablemos- dijo tomándome de un brazo sentándome a la fuerza

-Tuviste esa oportunidad hace tres años, y solo te largaste sin decir nada, así que ahora no me vengas con que quieres solucionar algo

-Si sigues enojada, quiere decir que me sigues amando

-Te equivocas, no estoy enojada, me siento incomoda con tu presencia, no entiendo que haces aquí, mejor solo regresa a México y déjame descansar…

Es mi cumpleaños numero 28, yo decidiré a que lugar iremos, se que esta mal que Haruka se quede sola en casa con su ex novio, pero bien dicen que en la guerra y en el amor todo se vale, mientras Marco no le diga que yo lo invite, no tiene por que haber problema.

-¿Entonces Waagenbau es el lugar al que quieres ir?- dijo Georg que se encontraba sentado en el asiento de enfrente, me miro por el retrovisor y yo asentí sin decir nada mas

-No me siento cómodo dejando sola a Mati- dijo de pronto Bill con un tonito de agua fiestas que no permitiría en mi cumpleaños

-No le pasara nada, ellos necesitan hablar

-¿Quién es el….exactamente?- Me dijo Tom haciendo una mueca de incomodidad al tener que preguntarme

-Lo único que puedo decirles es que tuvieron una relación larga, con muchos altibajos, pero se amaron de una manera que da envidia, tal vez arreglen sus problemas

-Ella…- dijo Tom agachando la cara- ¿Ellos siguen amándose?- parecía desanimado, es una oportunidad que no desaprovechare

-El la ama, viene a reconquistarla, ella…-tenia que mentir un poco- a veces menciona su nombre en las noches

Parecían desconcertados, a pesar de que quiero mucho a Matilda, siempre he tenido un poco de rencor, me cambio por Marco, aunque el estaba conmigo y con ella, después resulta que quiere quitarme a Tom…

Llegamos al lugar, luces fosforescentes lo adornan, es un lugar extraordinario, todos nos voltean a ver, aquí hay muchos prospectos que sin dudar puedo llevar a mi habitación esta noche, los chicos de la mesa de enfrente no están nada mal, pero su amiga…

-¿A quien estas viendo?- dijo Georg dándome la bebida

-A nadie, esos de ahí enfrente son los que me ven a mi

-Pues no me sorprende que te miren todos- dijo Tom encendiendo un cigarro

Lo mire de arriba abajo aquí pasara algo, pensé con gusto, el me miro de reojo y sonrió

Pasaron unas horas y ya todos estaban un poco subidos de tono, Tom también, afortunadamente tengo mas alcohol que sangre, hace falta una combinación muy fuerte para tumbarme.

-Hola- me dijo tambaleándose la chica de la mesa de enfrente- Tu vestido es lindo- dijo con una sonrisa un poco boba y un movimiento muy sexy

-Gracias, ¿Qué tomas?- le dije poniéndome a su costado. Conversamos un rato, después nos fuimos juntas a un rincón, ella pareció aceptar que bajara mis manos a su entre pierna, comenzó a besarme…

Una chica nos interrumpió, parecía molesta y se llevo a mi nueva amiga a jalones, la chica solo me sonrió y yo me despedí.
Me di cuenta de que Tom entro al baño chocando contra la puerta, después rio para sus adentros…creo que esta lo suficientemente mareado como para necesitar ayuda….

-¿Qué estas haciendo Cat?- dijo Tom al notar que mi manos rodeaban su cintura

-¿Qué parece que estoy haciendo?- le dije besando su cuello y poniéndome frente a el

-Se que me deseas- le dije mirándolo y acercándome a su boca

Él sólo atinó a sonrojarse y a pasar su lengua por sus labios. Se notaba el deseo en sus ojos y en su pantalón. Insinuante acaricié su torno y bajando nuevamente por sus brazos, lentamente llevé sus manos a mi cintura… entonces con un movimiento brusco, me abrazo y me sentó en el lavabo, bajo el cierre de mi vestido quedando mi torso al descubierto, lo admiro, le sonreí, masajeo mis senos como un niño curioso, se acerco a mi, lamio uno de mis pezones dejándome escapar un gemido, subió y beso mi cuello, tome su cabeza entre mis manos despeinándole las rastas, metió sus manos por bajo del vestido y acaricio mi sexo haciéndome desfallecer, me besaba frenético, casi lastimándome, tome su piercing con mis dientes, lo jale, hizo una mueca de dolor que me excito mas, sangro y a el no le importo, sonreía satisfecho mientras hacia y deshacía por debajo de mi ropa, baje y lo empuje a uno de los cubículos, me acerque a el y sentí la erótica reacción de su cuerpo, su lengua se movía sin control por dentro de mi boca, se desabrocho el pantalón y bajo su ropa dejando su miembro al descubierto, lo acaricie y después lo metí a mi boca, puso una de sus manos detrás de mi cabeza y comenzó a gemir, música para mis oídos…

-¿Tom?- escuche la voz de Bill acercarse al lugar donde estábamos, con paso torpe, aunque rápido. Me acomode el vestido mientras le dirigía una mirada seductora y un poco molesta de que alguien nos interrumpiera; salí del lugar empujando un poco a Bill que se paro en seco cuando me vio salir, le sonreí burlona y satisfecha. Mi respiración todavía se encontraba un poco agitada pero podía aparentar mientras caminaba hacia la mesa, al sentarme llamé al mesero y pedí un tequila triple…

En el baño…

-¿Pero que demonios estas haciendo?- le dije a Tom completamente desconcertado, el cerro la puerta saliendo un segundo después, con una cara de idiota que lamentablemente sabia que quería decir

-Aquí no paso nada- dijo en un tono nada discreto y salió riendo del baño…

En la mesa, Tom se sentó lejos de Catalina, le dirigí una mirada a ella, la esquivo con una sonrisa antipática mientras le tomaba a su bebida, todos lucíamos mareados, excepto ella.

Salimos del lugar entre risas y cantos, ya no estoy tan mareado como creía, sostengo un poco a Geo, Catalina camina delante de todos, lleva una sonrisa que me da miedo….

-¿Me acompañas a la puerta Tom?- le dijo Cat al llegar a su condominio

-¿Te la pasaste bien, Cat?- le dije mas hostil que nunca, me miro de manera frívola por unos segundos

-No estuvo mal- respondió abriendo la puerta y detrás de ella, iba Tom completamente idiotizado

……

-Te invitaría a pasar, pero no creo que sea prudente- le dije a Tom, se recargo en la pared, no me miraba, encendió un cigarrillo

-¿Por que?- dijo ofreciéndome su cigarrillo

-Por que no se que este pasando ahí adentro, se escuchan ruidos ¿No los oyes?- la verdad era que no se oía nada, pero esta tan mareado, que no notara la diferencia

-Da igual- dijo despreocupado, nuevamente me beso apasionadamente, lo aleje de mi, me miro confundido

-Nos veremos pronto- le dije caminando hacia la puerta, antes de que pudiera abrirla, enredo sus manos en mi cuerpo, dándome la vuelta, me beso nuevamente, algo lo detuvo, un ruido dentro del departamento se escucha el sexo, pensé desconcertada pero al mismo tiempo, feliz de que sea real, Tom me miro enojado, se alejo de mi, me miro y unos segundos después, las puertas del elevador se cerraban.

Abrí la puerta, no me preocupaba encontrar a Haru y a Marco en una posición extraña, ni que fuera la primera vez, pero…

Aquí no hay nadie…

Las luces están encendidas, se sigue oyendo aquel ruido…

-¿Haruka?..¿Marco?- camine por la casa con precaución, cuando me acerque al baño “No oficial”, nombre que le adjudico Haru ya que no era ni el baño de mi habitación, ni el de la suya, vi una silla que trababa la puerta, esto fue idea de Matilda…

-¿Marco, estas ahí dentro?- le dije con pesar, ya que sabia que estaba ahí

-No preguntes, solo ábreme- dijo en tono explosivo, jalando la puerta y haciendo ese ruido de sexo que Tom escucho, le abrí y salió echado humo

-¿Dónde esta Matilda?, ¿No puedes con ella ni por qué esta herida? Eres un verdadero idiota

-¡Cállate!, la perra me sedujo y yo como idiota volví a caer, me metí esperando que ella viniera, me encerró y puso esa estúpida silla- dijo entre gritos y pateándola- y no se a donde se fue, escuche el golpe hace horas

-¿Estas hablando en serio?- le dije ahora preocupada por el lugar donde se encuentra mi inteligente amiguita…

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