-Perdóname- me pide abrazada a mi regazo- yo jamás me permitiría que renunciarás a la vida por mi
-No lo hiciste Mati, eso es lo importante- le digo ya más tranquila...
No sé que es lo que ella pensaba, pero de un momento a otro... bajo de la barda e inclusive me extendió los brazos para recibirme de nuevo en la azotea. Yo estaba feliz por ella... estaba feliz de que no se iría de mi lado, que se daría otra oportunidad...
-Yo en verdad quiero estar con él, Diana- y llora, su voz tiembla como cuando los niños pequeños sufren... me rompía el corazón saber que su dolor solo sanaría con los años... muchos años de ausencia y de costumbre...
-Lo sé, encanto- le digo abrazándola más- pero... no podemos hacer nada para traerlo de regreso...
-Yo lo amo... siempre lo haré- me dice y ahora solo solloza. La noche ha caído completamente aquí en Hamburgo, hace frío... pero no el mismo que hace un momento. A pesar de que ahora todo parece incierto, sé que en el futuro las cosas estarán mucho mejor. Las personas desafortunadamente no somos para siempre. Unos se van antes...
-Debes encontrar una razón por la cual seguir... debes levantarte...- le digo
-La única persona que me sacaría del abismo se ha ido- y suspira, llora otra vez... solloza
-Tú debes salir de ahí por ti misma Matilda, debes hacerlo, debes lograrlo
-Pero- trataba de interrumpirme
-Nada de peros niña- le digo – si sigues con estas payasadas me voy a enojar...
-Me da gusto que estés aquí- se ríe levemente, después hipa y vuelve a reír- de verdad me da gusto...
-A mi también me da...- le digo suspirando- no quiero ni imaginar que hubiera hecho si al llegar me entero de que tampoco estás con nosotros
-¿Cómo supiste que estaba aquí?- pregunta cohibida
-Tu carta- le digo – Bill me la leyó... recordé aquella vez en la que me hablaste del aire colarse entre tus brazos y la azotea
-Bill...- dice suspirando- llego ayer en la noche al departamento, las luces estaban apagadas... vestía como Tom...
-¿Por qué?- pregunto totalmente desubicada...
-Bueno yo- y se encoje de hombros, siento como tiembla- lo confundí con él...y nos besamos...
Me quedé callada... no sabía que pensar... no tenía idea de que sentir...
-Perdóname, Diana- me pide de nuevo- pero... yo creí que...
-No tienes porque inventarme cosas- le digo tratando de no perder el control
-No es invento- me ve, sus ojos están brillosos- No recuerdo nada...yo te juro que...
-No importa- le digo acariciando su cabello- olvidemos esto...
-¿Me odias?- me pregunta bajando la mirada
-Jamás lo haría, bebé- le contesto suspirando- a pesar de que estoy desconcertada por lo que me dices... sé que han pasado cosas, estás confundida, Bill también lo esta...ellos son gemelos después de todo
-Solo perdoname- me dice acostándose de nuevo sobre mi regazo- te amo... gracias por estar aquí conmigo
-Siempre estoy contigo...-
-Tía Mati- dice de pronto la vocecita de Allison. Mat se endereza y sus ojos se iluminan- ¿Ya te sientes mejor?
-Sí- le dice Mat y extiende sus brazos. La niña corre feliz de la vida y se deja caer sobre ella, se ríe y se regocija en el regazo de Mat
-¿Ya encontraste al Tío Tom?- le pregunta en un susurro. Mat solo la ve y se levanta del suelo con ella en brazos, me extiende su otra mano y me ayuda a ponerme en pie. Estamos entumecidas por el frío y por la extraña posición en la que estábamos sentadas. Me quedo mirándola atentamente
-Sí- le responde de nuevo- ya se donde esta- y bajamos las escaleras lentamente. Alli enrolla sus bracitos en el cuello de Mat
-¿Dónde esta?- le pregunta de nuevo con ese sigilo
-Pues, el se ha ido, pero te manda muchos saludos y dice que te ama y que pensará en ti todo el tiempo- responde Mat sonriendole a la niña
-¿Ya no va a venir a jugar conmigo nunca?- dice Alli con lagrimitas en sus mejillas
-No, mi amor- le contesta suspirando.
Allison es una pequeña todavía, cumplió apenas los 5 añitos y comprende que la ausencia de Tom será eterna... al entrar al departamento todos nos ven asustados... Mat hipa otra vez al ver a Bill, el también la mira...
Gustav se acerca a nosotras y retira de los brazos de Mat a su primogénita y después la abraza, ella llora un poco y le agradece a nuestro hermoso osito, después Geo también lo hace con nostalgia, Andreas y los J's que lo hacen al mismo tiempo, ella no deja de llorar pero abraza a todos, entre susurros escucho muchos “lo siento”. Zay la abraza un segundo después dejando a la pequeña Amelie en brazos de su padre, ella soba su espalda sin decirle nada. Mat recarga su cabeza un momento sobre el hombro de Zaybet... hasta que nos percatamos que hay una personita hermosa parada en un rincón, viendo toda la escena sin acercarse si quiera...
De pronto todos nos quedamos callados y es cuando veo que admiran la vestimenta de Mati, ella de un momento a otro, se siente cohibida e intenta taparse con sus manos, cuando, y sin previo aviso, Bill la abraza cada vez más y más fuerte, Mat se encuentra en shock y no sabe que hacer, hasta que Bill la suelta, se miran y ahora ella lo abraza a él... comienzan a llorar juntos, se dan el pésame... se quedan en la misma posición por horas, hasta que vuelve a amanecer.
Mat se quedará en su departamento y todos los demás nos iremos, todos los demás tenemos dónde estar, ella parece sentirse un poco incomoda... y así... pasan otros dos largos meses. A veces Bill llora por las noches y me angustio mucho, esas mismas noches llamo a Mat a su celular, sigue sin conectar el teléfono de casa, coincidentemente, ambos se han sentido mal... desde aquella vez ellos no se han visto, parece que se sienten mucho mejor pero ella no pregunta por él, ni él por ella.
...
-Esperamos no molestarte- le dice Simone a Mati, llegamos al departamento, todo se ve impecable- has estado ocupada por lo que podemos ver
-No me molestan, es un gusto tenerlos aquí- nos dice a nosotras y a Gordon que está al costado de su esposa- y pues... solo re acomode aquí
-Se ve muy bien- dice Gordon bebiendo de la taza de té
-Muchas gracias- le dice y se sienta con nosotros. Conversan animadamente de muchas cosas, sonríen, se siente bien el ambiente. Hasta que llega de nuevo el momento en el que Tom sale en la conversación. Después de 4 largos meses de luto, ellos también se dan el pésame, lloran un poco
-Sabía que no había engendrado a un inmortal*- nos dice Simone, dejándonos sin habla... hasta que ella lloro otro poco...
…
-¿Segura que no quieres que vengan?- le pregunto insistente
-Segura- me dice- no quiero traerlos a este ambiente lleno de melancolía
-Ellos quieren verte- le digo de nuevo- no seas injusta con tu familia
-Ellos van a verme muy pronto, tengo planeado un viaje para el mes que viene- me dice tranquilamente- tengo un fondo de ahorro enorme, me lo gastaré en ir y venir a México, y también en regalos y esas cosas
-¿Podemos pasar?- dice Georg abriendo levemente la puerta del monster house, luce preocupado. Mat le hace una mueca y él pasa junto con Andreas...
-Tenemos pistas de quién asesino a Tom- suelta Andreas orgulloso
-¿Quién qué?- pregunta Mat poniéndose pálida
-Disculpa Mat- le pide Andreas sosteniéndola del brazo- creí que te daría gusto...
-¿Quién fue?- pregunta reponiéndose de la nada- ¿¡Por qué no me habían dicho que fue asesinado!?- y vuelve a llorar, nosotros nos miramos extrañados
-Tu ya lo sabías, mi amor- le digo abrazándola y me aleja de su lado
-Claro que no- dice llorando- Ya dimelo Andreas- voltea a verlo enojada
-Hubo otro incendio como el de tu casa del Ebel- le dice- y otro muerto como el de las afueras de Hamburgo
-¿Mi casa del Ebel se quemo?- pregunta en llanto- ¿¡Como puede ser!?
-Matilda, tu ya sabías todo esto- le dice Georg tratando de calmarla. Ella se detiene y parece que piensa, no dice nada más. Le hacemos un gesto a Andreas para que continúe, lo único que nos dice es que el asesinato fue en París, provocado a un hombre mayor llamado Luka Duvocobich...
Sin saber que mas decir del asunto, Matilda nos pide que la dejemos sola. Después de mucha insistencia, logra convencernos...
-Júrame que no harás
-Nada estúpido- completa la frase- te lo juro. Yo te llamaré más tarde
-Conecta el teléfono de aquí. Tu celular lo tienes abandonado en un rincón.
Sonríe y en ese momento Andreas vuelve a poner el teléfono fijo en su lugar. Le agradecemos y nosotros nos vamos
...
-¿Quién crees que este haciendo todo esto?- me pregunta Geo, ya camino a casa Kaulitz
-No tengo idea- le respondo- no hay correspondencia...
-Claro que la hay- dice Andreas, que estaba muy callado hasta ahora- Tom la amaba y ese doctor la odiaba. La correspondencia es Matilda, pero si quisiera hacerle daño a ella, ya lo hubiera hecho
-¿Quién puede ser?- pregunta también Rick, acongojado por todo lo que pasa...
...Matilda...
Mi amor, perdoname por mi cobardía, perdona que no podré alcanzarte como tanto lo deseo, pero... aún tengo cosas que hacer aquí. Se que comprenderás. Fui muy feliz a tu lado, como jamás en la vida había sido y como estoy segura que jamás volveré a ser, cada rincón de nuestra casa, de mi cuerpo.. tiene un recuerdo imborrable de tu persona, de los días a tu lado. Te extraño, como a nadie jamás lo haré... sé que si pudieras estarías aquí conmigo... pero el destino fue nuestro enemigo otra vez.
Te amo... siempre lo haré... no porqué te hayas ido el sentimiento en mi ha muerto. Jamás morirá. Mientras exista el día y la noche. Mientras me llene el perfume de las flores te amaré...
-Te amo- digo besando mi libreta, esa que todo tiene escrito pero no leo. Me despido de cada rincón de la casa, porque sé que debo hacerlo, sé que algún día me iré de aquí- no pienses mal, mi amor- le pido volteando a nuestra habitación- no me hace falta un lugar para recordarte si te tengo conmigo todo el tiempo...- agarro fuertemente entre mis manos el dije del enorme corazón. También me hago de valor, trato de no llorar pero es imposible. Cada palabra mía tiene un recuerdo de él... es inevitable no extrañarlo... así que voy de nuevo ahí, abro la puerta del estudio y puedo verlo colgado. Se que no está ahí, sé que el no estará- te amo- digo lanzando un beso al cielo, sentándome junto a la pata del piano y abrazándola fuertemente...
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