Todos alguna vez estaremos Oliendo Pelusas.

¡Bienvenido seas alma perdida!

Anteriormente, hablando del año 2009, este espacio estaba dedicado a la publicación de sandeces, aka fan fiction de la banda alemana de poprockpunknoseque Tokio Hotel.

Sin embargo, después del tiempo que ha sucedido, la temática ha cambiado y, aunque en los archivos están aún esas sandeces, probablemente los escritos que aparecerán próximamente sean más de otros temas, que de la misma banda.

Éste sigue siendo su espacio, éstas siguen siendo sus letras, y esta siempre será la agonía de las palabras.


jueves, 9 de septiembre de 2010

Capítulo CXLV – Mis labios....


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Es la última canción de amor que quiero escuchar...

.Georg...

-Lamento mucho tener que avisarte hasta hoy- le dije a mi esposa... varias horas después de regresar a casa... aquel día del adiós, los aeropuertos cerraron su entrada a nuestro país y por supuesto que toda Alemania tenía prohibido salir a cualquier otro lugar...

-No lo puedo creer- me dijo suspirando- ¿Como es que paso?

-Fue un asesinato- le digo rápidamente- pero no sabemos nada del asunto

-¿Cómo está Bill?

-No lo sé- le confieso- no he podido verlo, está en su casa, sus padres están ahí, no me gustaría incomodarlos, lo único que sé es que ya acepta comer ¿Y Diana?

-Desconcertada y destrozada- suspira- Todo fue tan rápido, regresamos a México y en menos de... Tom... no lo puedo creer, siente mucho todo lo que esta pasando y quiere ver a Bill, pero comprende que ahora no desea ver a nadie... Ella esperará hasta que él se sienta mejor...

-Mándale mis saludos, en cuanto yo sepa algo con los aeropuertos les aviso para que lleguen, necesito un abrazo tuyo, como el de nadie más

-Contemos los días mi amor- dice pensando- 24 de enero... hace 4 días que paso y no se sabe nada... seguro podré verte hasta el próximo mes

-Estaremos en contacto de todos modos- le aseguro muriendo de coraje por no poder hacer nada para que ella esté conmigo

-¿Como esta Matilda?- pregunta... ya estábamos a punto de colgar

-No tengo idea...

...Javy...

Es difícil sobrevivir a esto. La situación es cada vez más extraña, ahora nosotros estamos en el departamento de Mat, vigilados noche y día, al fin se ha descartado la posibilidad de alguna pista aquí. Lo único que tienen es una guitarra

-Quisiera ir a mi casa del Ebel- dice Mat saliendo de su habitación.... se ve tan triste, no ha dormido muy bien y mucho menos ha comido, se la pasa tarareando canciones... o abrazada al piano

-Es una buena idea- le sonrió, ella sigue con su mirada perdida en el horizonte

-Es imposible- me dice Andreas molesto

-¿Pero por qué?- levanto la voz, haciendo que note que no me gusta su tono

-Porque esa casa ya no existe, es un montón de basura, es un montón de polvo...

-¿Que paso?- pregunto extrañada

-No estamos seguros....- contesta suspirando- por lo que hemos podido averiguar el incendio fue provocado y nosotros aún estábamos en la cena.... quien quiera que haya hecho esto quería jodernos a todos...

-Yo le prometí a Matilda ir a esa casa- le digo preocupada- no sé como tome la noticia de que ya no existe....

-Javy- entra de pronto el rey de roma a la cocina, muy feliz de la vida

-Hola Mat- la saludo con toda la naturalidad del mundo... toda la naturalidad fingida- ¿Como andas?

-Bien- me dice rebozando de alegría- ¿Y tú?

-Bien también- le contesto esperando que me diga la razón por la cual está tan feliz... sin embargo... solo se desmaya...

...Gustav...

-Bill...- toco a la puerta de su habitación, ahora que los J's están al cuidado de Matilda, Andreas también se la pasa allá. Gisela, Georg y yo venimos todos los días, sin embargo Bill sigue en ese estado de inconsciencia

-Pasa- me indica

Entro al cuarto, el esta tumbado en la cama, me siento junto a él y trato de entablar una conversación. Logró que me hable un poco, pero al paso de unos cuantos enunciados es casi imposible continuar, siempre tocamos temas difíciles; pasado, futuro o amor...

-Perdón- le pido de inmediato al ver que lo incomode

-No te preocupes- me contesta limpiándose las lágrimas- es imposible no recordarlo todo el tiempo...

-Lo extraño- digo sonriendo nostalgicamente, sin haber pensado que eso le dolería a Bill...

-Yo también- y llora de nuevo- no tengo idea de como voy a vivir sin él....

-Estoy contigo- le digo tomando su mano- y Georg, Gisela y todos los demás... también tienes a Diana...

-Mi Diana- dice sollozando- también la extraño, la quiero a mi lado...

-La traeremos, en cuanto se solucione lo del aeropuerto estará aquí....

...Yo no sabía que esas serían palabras vacías...

Ya ha pasado un mes desde su muerte y todo en casa sigue igual, Bill sigue sumergido en su cama, Matilda en su mundo de colores y nosotros al cuidado de ellos, esos dos... todos creemos que necesitan hablar, necesitan consolarse mutuamente... pero... debemos ser honestos, ahora es imposible salir de casa...

Todo el mundo sabe ahora lo que ha sucedido, la familia de Haruka se enteró y ahora no dejan de llamar preguntando por ella... me apena decirles que no está en ésta casa, sino en el departamento, y que se niega a hablar con cualquiera por teléfono. Están preocupados... mucho...

...Gisela...

-No te preocupes- le digo a Mati, se encuentra en mi regazo llorando otra vez, ella acaba de tirar la sopa que le hice, tuvo un arranque de desesperación. Ahora estaba siendo atendida por un psiquiatra y le daba medicinas para dormir...

-Gracias- me dice sin dejar de llorar- me siento tan sola...

-Aquí estoy Haru- le digo tratando de no llorar

-Lo extraño tanto Gis... no tienes idea de cuanto. Su voz, su olor... cuando se paseaba por los pasillos tarareando canciones, el sonido de sus pasos al caminar, sus gestos... sus besos...me duele no poder estar con él...

-Ya Mati, no te atormentes así- le pedí, la verdad es que eso no le hacía bien y a mi tampoco. Tom era una persona muy querida para mi, yo también lo extraño mucho...

-Recuerdo cuando me pidió matrimonio- solloza- yo no lo podía creer, y después no hubo poder humano que borrara la sonrisa de mi rostro... que estúpida fui...si no hubiera

-No fue tu culpa- la interrumpo levantando la voz- no fue culpa de nadie

-¿No?- pregunta irónica y se levanta de la cama como puede, sus piernas casi se doblan- Dime Gisela, dime ¿Por qué Tom no está aquí?- y levanta una ceja con esa prepotencia que la caracteriza

-El fue asesinado- le digo sin dudar, creo que estábamos evitando este enfrentamiento, pero algo que bien me enseño Matilda es a jamás bajar la guardia cuando alguien cree saberlo todo. Al escuchar mi respuesta se quedo callada...

-¿Por qué fue asesinado?- me preguntaba

-No lo sé, pero no tiene nada que ver contigo- le respondo de inmediato, ella sigue sin bajar su defensa

-Si yo me hubiera ido de Japón a México, Tom estaría vivo- me dice con decisión. Ahora se que es eso lo que le carcome la consciencia, se siente sola, y lo peor, cree que ella causo su propia soledad...

-Puede ser- le digo suspirando- pero no podemos estar seguros, hasta saber quién lo mato

-Eso no me lo devolverá....-cambia su visión a otro lado- nada de lo que haga me permitirá verlo otra vez...

-Si te hubieras regresado a México, de Japón o de aquí, Tom jamás hubiera vuelto a sonreír- ella se me queda viendo, con sus ojos abiertos como un plato y sus lágrimas que vuelven a rodar en sus mejillas – Tu cargas un peso muy grande Matilda, tu hiciste a Tom feliz hasta el momento de su muerte...

-Gis- me dice hincándose a mi lado otra vez- Yo amaré a Tom toda mi vida, yo no seré nada sin él... mi persona no tiene sentido en el mundo si no está el conmigo, sino me veo a través de sus ojos. Mi vida no tiene sentido sin el amor de Tom...quiero irme con él... -Eso me mataba y yo nada podía hacer al respecto...

-Quiero que sus labios me besen por última vez...- dijo entre pausadamente, antes de sufrir otro desmayo..

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